En una entrevista con Carlos Puig ayer, el presidente Calderón dijo, entre muchas otras cosas, dos especialmente interesantes, y discutibles. La primera tiene que ver con el tema de consumo de drogas en Estados Unidos: "Los americanos en dicho punto, con todo respeto, y con todo afecto, pues han sido irresponsables, pues no bajan el consumo de drogas; y discursivamente sí dicen que van a trabajar en la prevención de adicciones, pero por ejemplo curiosamente no modifican su presupuesto para la prevención de adicciones y sí han ido tolerando la legalización de facto en varios estados". A propósito de las armas dijo: "La Assault Weapons Ban, que fue derogada en 2004, es una de las causas principales que le dieron un poder inusual a las bandas criminales mexicanas. A nosotros nos ha llevado a decomisar 85 mil armas en tres años… La verdad es que hemos desmantelado prácticamente un Ejército y lo siguen proveyendo y no se toman en serio este tema". En conclusión: "Tenemos un vecino que a pesar de tener un Presidente muy responsable, y muy preocupado por México, sí es un vecino en general irresponsable".Tiene razón el Presidente en su evaluación de lo que realmente está haciendo Estados Unidos. El aumento de presupuesto solicitado por Obama al Congreso para reducción del consumo, para los siguientes cinco años, es muy pequeño (15%), pero seguramente será recortado por los legisladores, cosa que Obama sabe perfectamente. También es cierto, como se ha reiterado en esta columna desde hace meses y en mi libro con Rubén Aguilar El narco: la guerra fallida, la tendencia hacia la legalización, por lo menos de la mariguana, es cada día más fuerte en Estados Unidos. Y además, en los casos en los que Obama ha podido o ha tenido que definirse ante esta tendencia, su postura ha sido de hacerse de la vista gorda. Es el caso con la actitud de los hospitales de la Administración de ex combatientes (VA) frente al uso de la mariguana médica, frente a la no aplicación de la ley federal en los estados que legalizaron la mariguana médica; y en pocas semanas lo será en su definición frente al fallo de los concejales del Distrito de Columbia de legalizarla también. Obama puede vetar dicha decisión, o puede dejarla pasar; apuesto que hará lo segundo.Donde Calderón, en mi opinión, se equivoca es al considerar irresponsable dicha actitud. Al contrario: es mucho más responsable y sensata, por ejemplo, que la histeria y los lugares comunes de Nancy Reagan en los años ochenta y su campaña de "Just say no". Si Calderón fuera residente de California, seguramente votaría en contra de la Propuesta 19 de plena legalización; yo votaría obviamente a favor. Pero la pregunta es cómo votará la gente más tolerante, más progresista, más y más promexicana en California, ¿a favor o en contra? ¿Quiénes son los irresponsables? ¿Los que sí quieren seguir encarcelando gente a tasas más altas que en cualquier otro país del mundo y que quieren seguir gastando sumas estratosféricas para prohibir algo incontrolable? ¿O los que quieren hoy aceptar de buena gana una realidad que no parece perjudicar demasiado a la sociedad norteamericana: un número elevado de usuarios más o menos regulares de mariguana?En el tema de las armas tampoco se entiende del todo la postura presidencial. Si se aceptaran las cifras oficiales, habrían entrado a México desde principios de este sexenio unos 2.5 millones de armas (2 mil al día por 365 días al año por tres años). Se han decomisado 85 mil, es decir 3.5%: la futilidad sería aberrante. A menos de que las cifras sean inexactas: que no hay 2 mil armas diarias, sino muchísimas menos; que no provengan todas de Estados Unidos; y que no sea el Assault Weapons Ban el motivo de la hipotética expansión del arsenal del narco. Entonces: o no son tantas armas, o es ínfimo el porcentaje de decomisos. ¿Quiénes son los irresponsables? ¿Los que permiten la salida de armas; o los que no saben, no pueden o no quieren impedir su entrada? www.jorgecastaneda.org; jorgegcastaneda@gmail.com