El 26 de enero de 2011, los padres de Florence Cassez recibieron una carta firmada por Pedro H. Arellano, secretario adjunto de la Comisión Episcopal para la Pastoral Social (CEPS).Arellano en particular y la Pastoral Penitenciaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano llevan años trabajando al interior de los reclusorios en casos complicados, ayudando a la liberación o preliberación de reos. Los padres de Cassez habían acudido a la Iglesia católica pidiendo ayuda para lo que consideran la injusta encarcelación de su hija.Arellano reunió a un grupo de más de veinte especialistas —abogados, criminalistas— para que analizaran el expediente de Cassez, agentes de la pastoral se encontraron con algunos de los protagonistas del caso.Después de ese trabajo de análisis e investigación que llevó meses, Arellano —quien es abogado— escribió a los Cassez una primera nota que decía: “La Pastoral Penitenciaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano, ha estudiado el caso de su hija y ha encontrado irregularidades de derecho que hemos transmitido al Señor Magistrado encargado del amparo esperando que las tome en cuenta para que ella se beneficie de la justicia y de un proceso debido.“Aunado a lo anterior, hemos apoyado los trabajos que está realizando el Centro Dominico de Derechos Humanos ‘Fray Francisco de Vitoria’ participando en los foros que nos han convocado para expresar el resultado de nuestros estudios en investigaciones a favor de Florence Cassez.“El trabajo a favor de Florence continua y muchas personas e instituciones de buena voluntad seguimos poniendo nuestro mejor esfuerzo para lograr el reconocimiento de su inocencia.”Aunque la investigación de la pastoral, como lo muestra la fecha en la carta, terminó hace más de un año, no fue sino hasta finales de 2011 cuando se dio a conocer el trabajo de Arellano y sus especialistas gracias a un documental transmitido por la televisión francesa.Lo interesante de la investigación de la Iglesia católica es que, como lo demuestra en su carta y en sus afirmaciones en el documental, es que ellos piensan que la francesa es inocente, no solo que hubo violaciones al debido proceso.Las conclusiones de la investigación de la CEPS han sido fundamentales para convencer a varios funcionarios franceses que dudaban de la inocencia de Cassez y que ahora han puesto toda su fuerza política detrás de los esfuerzos del presidente Sarkozy.De qué influencia tendrá el informe de los expertos de la Iglesia frente a los ministros mexicanos de la primera sala nos enteraremos el 21 de marzo.
La Iglesia y Florence Cassez
