El gobierno del silencio en la ONU

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La cancelación del viaje del presidente Peña Nieto a la Asamblea de la ONU sobre drogas (Ungass) es negativa por cuatro razones. Y la falta de explicación es casi peor: una pifia más del gobierno del silencio.
Primera: porque el periplo lo puede realizar EPN en 12 horas. Le dedicará un par de días a una visita completamente inútil a Dinamarca, esta semana. Hay una total asimetría entre ambas actividades diplomáticas.
Segunda: México, junto con Colombia y Guatemala, fue uno de los tres países que propuso, en diciembre de 2012, adelantar Ungass, de 2019 a 2016. Lo hizo porque era urgente tratar el tema de la guerra fracasada, sangrienta, onerosa y absurda contra las drogas, en México más que en otros países. Frente a gobiernos trogloditas como los de Rusia, Malasia, Paquistán y un par de aberraciones europeas (Suecia e Italia), México entendió que era preciso acabar con la postura prohibicionista. Ahora resulta que el convocante se ausenta, sin mediar explicación alguna.
Tercera: es incomprensible la cancelación de Peña en vista del escándalo que el gobierno armó con sus foros sobre la mariguana en cinco ciudades de la República, con numerosos participantes—unos mejores que otros—, gran cobertura de prensa, algunos pasos delante significativos de parte de Osorio Chong, y la trascendencia del fallo de la Suprema Corte sobre la mariguana. Todo ese argüende era para llegar a Ungass con una posición socialmente debatida, creando un principio de consenso entre fuerzas políticas internas e incluso poderes fácticos, y unificando al gobierno. Ahora resulta que dice mi mamá que siempre no.
Por último, es reprobable la cancelación porque dejar la definición de México en la ONU en manos de un miembro del gabinete desmerece frente a otros gobiernos y devalúa la trascendencia de dicha definición. El país no puede colocarse a la vanguardia de la comunidad internacional o incluso latinoamericana si su Presidente ni siquiera se toma la molestia de presentarse en Nueva York para exponer su “nuevo” enfoque. Se pierde la oportunidad de ponernos al día en esta materia, como lo busca hacer la iniciativa de ley de Roberto Gil.
He escuchado todo tipo de razones sobre la cancelación. Una, que la firma por jefes de Estado del acuerdo de la COP 21 en Nueva York el 22 de abril (tres días después de la cancelada intervención de Peña), opacaría Ungass, o al revés, que Ungass opacaría COP 21. Otra, que el primer ministro de Italia, Matteo Renzi, que viene a México, cambió su fecha, y eso complicó todo (???).
Y la única verosímil: el consenso alcanzado dentro del gobierno sobre la mariguana no da para un gran anuncio en la ONU. Los foros fueron el parto de los montes. Ni siquiera habría acuerdo sobre mariguana médica, despenalización de posesión, aumento de gramaje de dosis permitidas, y excarcelación  por delitos anteriores. Y para no decir nada, mejor no ir. Y seguir gobernando en silencio.

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