La guerra de los libros de texto

Siempre he pensado que la marca sobresaliente de este gobierno es la incompetencia. Podríamos encontrar muchas más: el autoritarismo, la ideología trasnochada de los años setenta, el provincialismo exacerbado, la apelación constante a los peores sentimientos y atributos, que al igual que todos los pueblos, el mexicano también los tiene. Pero no, es la ineptitud.

La 4T: mienten como respiran

Aun en el país de la simulación por excelencia, lo que hemos atestiguado en los últimos días por parte de los candidatos presidenciales de Morena es impresionante. El grado de cinismo de parte de los candidatos, de los dirigentes, y del propio López Obrador, no tiene límite.

Ensayo general

El Estado de México mañana no es un laboratorio. Es un ensayo general de la elección de Estado que será la presidencial del año entrante. Se trata de comprobar que gracias a la utilización masiva de los recursos —humanos y fiscales— del Estado se puede asegurar la victoria de una candidata en buena medida impresentable.

La resistencia y la Corte

Nadie puede llamarse a engaño. Las leyes aprobadas por Morena en el Congreso la semana pasada, y en particular por su bancada en el Senado, que sesionó en lugares extraños, serían declaradas ilegales por cualquier tribunal constitucional por violación al procedimiento legislativo.

La tómbola del INE

Con toda la razón del mundo, los partidos de oposición, activistas y comentócratas se han volcado en estos días sobre el tema del Plan B y la defensa del INE.

El gasto social bajo la 4T

Sergio Sarmiento siempre encuentra y divulga datos interesantes que además son confiables, lo cual permite sacar conclusiones interesantes de los mismos. Hoy retuiteó una tabla de la OCDE, reproducida por Informal Economy, y que mide el porcentaje del PIB que cada país miembro de la organización desembolsa en “gasto social público” (Public Social Spending).

¡Qué desmadre el aeropuerto!

Todo el mundo, desde Reforma hasta Joaquín López-Dóriga y miles de usuarios, estamos furiosos con el Aeropuerto Benito Juárez. Incluso López Obrador lamenta, muy a su manera, el mal funcionamiento del AICM.